El pasado diciembre mi padre vino del pueblo y me trajo unos membrillos que le habían regalado. Así que, después de preparar un dulce de membrillo al uso siguiendo la receta del libro, se me ocurrió que con los restantes podía experimentar y añadir canela, a ver qué pasaba. Lo que pasa es que le va, le va mucho y el dulce es más del gusto de los golosos, pues el resultado es menos ácido y muy ligero el aroma a canela. A mi padre le gustó más que el anterior, y creo que a muchos también les gustará. Espero que todavía queden membrillos en alguna parte para que podáis probar la receta. Si no, guardadla, que ya habrá ocasión.
A mí me gusta tomar este membrillo con queso de Burgos, pero también hace buenísima combinación con un queso fuerte o con foie de pato, por ejemplo.
Música recomendada: Canción a la Caleta el Membrillo (Osvaldo Rodríguez, 1978)
Ingredientes:
1 kg de membrillos
800 g de azúcar
2 cucharaditas de canela molida
2 limones, pelados y sin pepitas
Preparación:
Lavamos los membrillos y los troceamos, sin pelar, quitándoles las semillas. Los ponemos en el vaso con el zumo de limón y trituramos 30 segundos a vel. 5-7 progresivo. Bajamos con la espátula lo que haya quedado en las paredes y programamos 15 min., 100ºC, vel. 5 o superior si vemos que no se mueve el contenido del vaso.
Añadimos el azúcar y la canela y programamos otros 15 min., 100ºC, vel. 5
Volcamos en moldes o tupper de plástico y dejamos enfriar.
Una vez frío, refrigeramos en sus moldes. Desmoldamos antes de servir. Imprimir receta
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