¿Te aburre cocinar siempre las mismas verduras? ¿ Te encantan las que pides en el restaurante chino aunque no sabes cómo se llaman? El bok choy (brassica rapa chinensis) es una col pequeña, de sabor similar a la acelga, pero más suave. Contiene altas cantidades de vitamina A y C y glucosinatos, que en pequeñas cantidades previenen el cáncer.
Presente en los comercios de productos orientales, cada vez es más fácil encontrarla en otras tiendas, como en Aldi, de vez en cuando.
Prepararlas es bastante sencillo: se lavan bien las hojas y se sumerjen en agua hirviendo de 2 a 3 minutos (o un minuto si las queremos muy crujientes) y ya están listas para saltear en un wok o sartén. Si queremos que queden de un color verde brillante, preparamos un recipiente con agua muy fría y cubitos de hielo y las pasamos aquí al sacarlas del agua hirviendo, sumergiéndolas unos segundos y pasando al escurridor.
Música recomendada: L'amant (El Amante, b.s.o, 1992)
Ingredientes:
(3-4 raciones)
4 coles de bok choy fresco
2 dientes de ajo
2 cucharadas de salsa de ostras
1/2 cucharada de salsa de soja
aceite de girasol (o de oliva virgen, al gusto)
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| Bok choy |
Preparación:
Calentamos 2 l de agua y llevamos a ebullición.
Lavamos las hojas de bok choy y escaldamos 2 o 3 minutos (dependiendo de lo gruesas que sean las pencas). Pasamos al agua fría (opcional) y al colador. Reservamos.
En un wok o sartén amplia calentamos un poco de aceite (aproximadamente una cucharada) y salteamos los ajos picados.
Añadimos el bok choy y removemos. Incorporamos la salsa de soja y la de ostras. Mezclamos durante 1 minuto y retiramos del fuego.
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